Es fácil pasearse por cualquier red y leer en las bios frases como “apasionada de las redes sociales”, “experto en social media”, “especialista en Comunicación 2.0”, la mayoría provenientes de personas que desarrollan su actividad profesional en el social media marketing y buscan frases que impacten en los posibles clientes. Pero lo mismo ocurre si, por ejemplo, te das una vuelta por el apartado «Servicios» de la mayoría de webs de agencias de publicidad, de relaciones públicas o de consultoras y también ponen que lo hacen aunque uno sepa que no están tan metidos en el 2.0.
¿Cuántas veces has ido a una conferencia sobre temas de Internet y a la segunda frase del ponente te has dado cuenta que habla de oídas? Lo mismo pasa con los formadores, por ejemplo. En ambos casos es gente que comunica muy bien y eso es suficiente para su audiencia que, a menudo, tiene aún menos idea que el que habla.
Estoy seguro que todos los días empresas que buscan quien les ayude a entrar en el mundo 2.0 reciben impactos de este tipo y contratan a proveedores que en realidad no están nada preparados para manejar su entrada en el mundo digital. En algunos casos hay agencias que contratan a otras más pequeñas y digitales. No lo censuro, nosotros, en 2shareworld, no tenemos reparos en trabajar así mientras nos encaje económicamente.
Pero a lo que iba. Sin querer dar lecciones ni repartir carnés de experto, que aún nadie ha definido que son, ahí van mis “pruebas del algodón” para saber si quien tienes enfrente sabe realmente de lo que habla o no:
- Aquí no se puede dar el “en casa de herrero, cuchillo de palo”. Si viene una agencia o consultora a venderte sus servicios online fíjate cual es su vida 2.0 (deberían tenerla visible en su web). Si no tiene presencia o si la tiene pero hace 3 meses que no actualiza sus sitios mal vamos.
- Si la tiene, parece que la actualiza pero, mira por donde, te ha costado encontrarla y no tiene sus sitios conectados, sospecha. No se puede vender Estrategia 2.0 si no tienes una ni para ti mismo.
- Si es un profesional “glogueale”. ¿Tiene perfiles en Internet? ¿Es activo? No se trata de que haya puesto 10.000 tuits, pero tampoco de tener una cuenta de Twitter sin casi actualizaciones, o la última siendo de 5 meses atrás o sin apenas seguidores y seguidos. No hace falta que esté en todas partes ni que tenga perfil en Google+. Pero algún tipo de actividad tiene que tener si pretendes que te asesore en dónde y cómo estar. Y, eso sí, no puede tener sus perfiles descuidados, con fotos de la primera comunión (no es literal) o incompleto.
- Sería muy bueno que tuviera un blog para que pudieras ver lo que opina sobre el marketing online y conocer sus experiencias, su metodología o leer sus consejos.
- Y ya no te digo si, además, ha publicado algo y lo ha subido a la Red. Una presentación en slideshare, un vídeo o una infografía.
- Por supuesto siempre es interesante ver qué tipo de proyectos ha llevado a cabo. Si es profesional/agencia desde hace poco o ha desarrollado proyectos con poco material gráfico quizás no los tiene colgados pero eso no le inhabilita para ser tu asesor (nosotros, de hecho, estamos ahora trabajando en la página de proyectos que colgaremos asap). Hay empresas y asesores de todos los tamaños para todas las empresas. Pero en cualquier caso, pregunta.
De hecho, para contratar a alguien se pide un CV y referencias ¿Por qué no seguimos ese mismo protocolo en este caso? Y ¿Es necesario que lo hagan todo y todo el tiempo? Pues no, tampoco es eso, pero algo de vida online tienen que tener. Para averiguarlo solo necesitas pasarte una hora en Internet.
¿Se os ocurre alguna “prueba del algodón” más que me haya dejado?
¡Que tengáis una feliz semana!
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David, me ha gustado el artículo, creo que ayudará a l@s no iniciad@s en todo esto del 2.0 a escoger con más acierto una u otra agencia que les ayude a iniciarse en este entorno. Para mí cuestiones importantes:
– Asegurar tanto como se pueda (y coincido plenamente con tus pruebas de algodón) que no contratas un charlatán 2.0.
– Buscar quien te acompañe no quien te sustituya.
– Preguntar a tu «coaching 2.0» como va a convertir tu web 1.0 en una web abierta, participativa y dialogante en el 2.0
Feliz verano!!!
Excelente entrada, ojalá que la lean muchos clientes que quieren iniciarse en el 2.0 y no saben a quien comprar. Como tú, veo muchas agencias y propuestas de agencias que hablan del 2.0 de oídas, y lo peor es que convencen..la lectura que hará el cliente si y cuando no funcione es que el 2.0 no sirve para nada, en lugar de «no tenía el partner adecuado».
El reto que plantea Mònica es la prueba de fuego de la prueba del algodón, ¡apasionante!
Bull’s Eye!
Si es un buen profesional del social media y el marketing 2.0, su estrategia de ‘inbound marketing’ habrá dado sus frutos: le habrás encontrado tú, y con facilidad. ¡Y no hablo de la guía telefónica! 😉
@Monica, me encantó la segunda…sí, señora, que te acompañen.
@eva, iba a poner eso mismo, que después muchos «clientes» no ven las expectativas cubiertas y paga todo el sector.
@francisco…mmm… siempre encuentras una forma de sorprenderme con tus comentarios. Pero también es verdad lo que dices 😉
¡Gracias por pasaros y comentar!
Muy importante tu reflexión David, estamos llegando a un punto en donde hemos de dar un puñetazo en la mesa y empezar a señalar a los «disfrazados».
Nadie puede imaginar el daño que están haciendo los «falsos 2.0» que van vendiendo «sus servicios» por allí, que junto a la ignorancia reinante, están dejando muy mal parada a las profesiones basadas en social media. Cada vez que un «falso 2.0» mete la pata nos perjudica a todos por igual, ya que el cliente pocas veces sabe la diferencia y piensa que cualquiera que tenga una cuenta de twitter ya es «experto» en redes sociales.
Hace dos semanas me contactó una importante agencia de video juegos interesados en estrategia, contándome que habían contratado a una periodista como Community Manager, cuando les pregunté su nombre y empecé a buscar en las redes me encontré con una chica recién graduada que había escrito sólo dos tweets en su vida (literalmente) y que tenía usuario de twitter desde hacía unos meses… ¡así vamos! …es una realidad que cada vez nos hace más daño.
Creo que es hora de que empecemos a hacer algo al respecto, ¡…Muy buen post!
Saludos
PR
Estupendo artículo. Realmente todavía hay demasiado desconocimiento en estos temas y muchos clientes caen en el error de contratar al proveedor por precio, y no se paran ni diez minutos a investigar por la red a quien van a confiar su preciada empresa. A caso dejaría alguien a sus hijos en manos del primero que ven por internet? Por supuesto que no. Entonces es difícil comprender como algunos empresarios dejan a sus empresas en manos del primer «ingeniero» que se les cruza con mucha labia pero poco conocimiento.
Jo David, qué buen post. Pasaré yo la prueba del algodón?? Me sumo al comentario de Eva respecto a lo del «sector» 2.0.
Gracias!!!
@Pedro, toda la razón. Tu comentario está en la línea del de Eva. Intrusismo se llama. Pasa en todas las profesiones pero en esta, que recién empieza, es grave tanto en cuanto estamos en la fase de coger confianza y porque se habla mucho de ella y eso genera expectativas muy altas.
@Raquel, si yo te contara lo del precio….uff.. es un tema donde se mezcla lo gratis de la herramienta con el conocimiento y eso, muchos clientes no lo piensan seriamente. Luego pasa lo que comenta Pedro, se contrata a cualquiera, se falla y pagamos todos. Ojo que me parece muy bien que haya gente que empieza, fantástico. Pero hay que tener muy claro hasta donde llega cada uno y que puedo esperar de alguien que acaba de empezar sobre los objetivos que me marco en mi proyecto.
@Nico, tranquilo, que tu la pasas 😉 … lo importante es que cada uno sepa hasta donde es capaz de servir a su cliente. Yo, por ejemplo, no domino SEM y por lo tanto si lo necesito para un proyecto me busco un partner para completar el equipo. El fallo está en querer saber de todo y hacerlo todo y bien, lo cual es imposible. Soy un firme creyente en la especialización.
Gracias a los tres por pasaros y dejar un comentario!
Hola David, voy a ser un poquito crítico, ya sabes lo que me gusta remover el avispero ;).
Te conozco y sé muy bien que esto de «repartir los carnés» no va contigo (por cierto, me ha encantado la expresión). Sin embargo, en este mundo de «expertos» últimamente veo demasiados repartidores de carnés y autoproclamados fiscales del universo social media. Y sinceramente, esto me asusta.
Me asusta porque veo demasiada gente que ha sacado carné de listillo y está dispuesta a levantar el dedo inquisidor, señalando a la marchanta (perdón por la jerga tanguera) a personas cuyo mayor crimen es, en el peor de los casos, intentar ganarse la vida con una profesión que están aprendiendo.
Y yo pregunto ¿quién reparte los carnés?. Porque yo juro que, en mi vida, jamás he visto a un tío listo tener que decir «soy listo». Ni a un tío inteligente tener que afiliarse al partido de los inteligentes y sacar un carné para que se le reconozca como tal.
Y es que el talento, la capacidad, la destreza, la habilidad, como la inteligencia, se ejercen y se demuestran en su ejercicio, no en el discurso. ¿A quién le importa lo que tiene que tener un jugador de fútbol para ser bueno? Ves jugar a Messi y sabes que es un puto crack. Aunque prácticamente lo hayan echado de su club porque no tenía condiciones físicas para ser jugador profesional.
Y entonces, digo yo, a estos fiscales del social media, ¿por qué les preocupa tanto la repartición de los carnés?. ¿Por qué les preocupa tanto lo que hacen o dejan de hacer los otros?. ¿A qué le tienen tanto miedo?.
¿Que hay gente inexperta que hace perder tiempo y dinero a las empresas? ¿Que hay gente que promete humo de colores? Por supuesto. Pero el que crea que sólo pasa en social media es porque nunca ha trabajado en otra cosa.
Y si la mala práxis es tan evidente como para que la noten y se escandalicen los «fiscales del social media», también lo será para las empresas que pretendan contratarles. Las cosas ocupan su lugar naturalmente, no necesitamos etiquetadores profesionales que nos digan quienes pertenecen al club de los listos y quienes al de los pardillos. No gracias.
Así que señores fiscales, yo no seré del club de los listos, pero tampoco soy un chivato.
Mis únicos consejos para alguien que busque un profesional, de cualquier índole, son:
1. «googlea» su nombre y vence la pereza de leer, al menos, cuatro cosas sobre él.
2. Intenta dejarte siempre una vía de salida por si la cosa no funciona.
Por último, yo no estoy muy de acuerdo con eso de que debe tener un perfil muy activo y tal… un médico no necesita tener hemorroides para operarte el culo.
🙂
Un abrazo grande y espero que no te tomes a mal estas palabras, de más está decir que no eres tú el objeto de esta crítica, y sé muy bien que la intención de este post no era, en absoluto, «repartir carnés».
Totalmente de acuerdo contigo David. Un buen community manager no solo tiene que saber qué el Google, Facebook, Twitter etc. Tiene que saber adaptar la estrategia a cada cliente. Ser un estratega en redes sociales muchas veces pasa por saber bien-aconsejar al cliente (que normalmente no tiene ni idea de qué va esto) las redes sociales en las que tiene que estar, en las que no tiene que estar. (Si eres una empresa Farmaceútica que vende productos para la alopecia … crees que alguien hará click en megusta?) Ayudar a mantener una presencia sólida y activa en las redes sociales en las que participe, aconseja sobre el estilo de comunicación, llevar un seguimiento y métrica de los acontecimientos etc.
Excelente post! Me suscribo a tu Blog. Un saludo!
@Ainhoa, jajaja.. me has hecho reir con lo de los calvos. Oye pero ¿y si consiguieramos que los calvos perdieran la vergüenza a darle al me gusta? Digo yo que habrá, afirmo, los hay, que se sienten muy orgullosos de ser calvos 😉
Gracias por el comentario y ¡por la suscripción!
@Mau, siempre te digo lo mismo, escribes poco pero cuando lo haces dejas comentarios-post de un nivel que me deja perplejo. Y en tu caso, como en el de Javistaff, ese espíritu crítico es super bienvenido. ¡Es la salsa de la discusión!
Yendo a tu tema. Me has dado una idea para un post pero te adelantaré algo de lo creo. No me importa la gente nueva ni la gente sin o con poca experiencia. Todo el mundo tiene un día para empezar, así que encantado de que estén aquí. Además, la competencia siempre es buena porque hace “crecer” el negocio en general (si es buena, claro). Creo que hay mercado para todo el mundo porque hay empresas pequeñas que no tienen acceso a según qué tipo de asesoría o servicio, así que por ahí ya tenemos un posicionamiento.
Lo que digo es justamente que: cada cual su posicionamiento, cada cual debe saber gestionar las expectativas (clientes y proveedores) y cada cual debe saber por lo que paga y el ROI de lo que paga. Eso funciona si todos tenemos claras las reglas del juego. La transparencia se transforma en un valor.
Pero el problema es:
1. La transparencia es un valor que pocos profesionales tienen y que casi ningún cliente quiere afrontar. Todo lo contrario, un cliente quiere oír “te pondré en la primera página de Google”, “vas a vender la leche en facebook”, etc…
2. Los que juegan a ese juego, a la larga, contaminan al resto. Es como los políticos, unos cuantos son corruptos y por eso pagan todos. En ese sentido sí, lo admito, tengo miedo.
3. Este es un negocio con barreras de entrada muy bajas, con poco conocimiento por parte del público en general y, por lo tanto, cualquiera puede pasar por experto.
Y efectivamente este problema no es exclusivo del Mk por Internet, se da en todas las actividades y disciplinas profesionales.
Y sobre el médico. No me refería a que hubiera tenido la enfermedad antes, me refería a haberla enfrentado antes o haberla estudiado. Volvemos al principio, tu primera operación de hemorroides será discreta y en la quinta serás un crack extirpándolas 😉 Siguiendo con el símil del futbol, no hay que haber sido un gran jugador para ser buen entrador pero sí tiene que gustarte el fútbol y haber visto muchos partidos. Pues aquí, creo yo, es lo mismo. Si no sé cómo funciona facebook, por ejemplo, ¿Cómo puedo asesorar a alguien lo que puede y debe hacer en él? ¡Ay, esas comparaciones!
Un abrazo Mau, siempre es un placer debatir contigo.
Bueno, voy a intentar no enrollarme.
Planteas tres puntos de conflicto, tres incendios que, al parecer, queman las manos de los profesionales, y en los que, si no he entendido mal, habría que intervenir para regular el sector y crear un entorno competitivo más justo.
Te respondo por puntos.
1. Como dices, la transparencia es un camino de ida y vuelta. Cierto es que hay clientes que quieren oír «te pondré primero en Facebook en cuatro días y vas a vender la leche». La pregunta es, como profesional serio ¿te interesan esos clientes?. ¿Te interesa un cliente que esté dispuesto a pagar una fortuna por la lámpara de Aladino?. Sólo si lo único que buscas es su dinero.
2. Ese es un problema que hay que resolver demostrando valor propio, no socavando el valor ajeno. Todos los días vemos diseños atroces, horribles, infumables, cosas hechas por el primo de alguien cuyo único mérito es haber sido el primero en la familia en instalar Photoshop. Y a veces ni eso. ¿Crees por eso que los buenos diseñadores son menos buenos?. ¿Has probado alguna vez un vino decepcionante? ¿has dejado de tomar vino por ello?.
3. Sí que son bajas. Pero no son más bajas que las barreras de casi cualquier otra profesión que puedes ejercer delante de un ordenador. Y hablo de diseñadores, periodistas, redactores, escritores, editores de vídeo, analistas, consultores de marketing, programadores, maquetadores, investigadores, ilustradores, delineantes, artistas y un enorme etc… Esa no es una característica intrínseca de este sector, sino de estos tiempos. ¿Y qué si las barreras de entrada son bajas? Tanto mejor ¿no?.
De verdad, yo no me preocuparía tanto por ello. Al final, las cosas ocupan solas el lugar que merecen. Sólo es cuestión de tiempo.
Respecto a lo del médico, por supuesto que debe haberse enfrentado a la enfermedad antes de operarte. Pero yo no he dicho eso. Yo digo que no estoy tan seguro que alguien que se proponga como consultor en social media deba tener, personalmente, una vida 2.0 muy activa. Ni siquiera, si me apuras, en su perfil profesional. No digo que no sea recomendable, digo que igual no le hace falta o no le apetece. Puede tener credenciales suficientes con su actividad profesional, con los clientes para los que trabaja, y no necesitar demostrarlo a través de sus perfiles personales. Es la base de la profesionalidad: puedes hacer trajes estupendos aunque no los uses. Al fin y al cabo, se trata de saber diseñar un traje, no de disfrutar vistiéndolo.
Lo ves, ya me he enrollado más de lo que quería.
Un abrazo!
jaja..no, nada de regulación «interviniente»… se regulará, en buena parte, solo.
Sobre los puntos, pues sí, son puntos de vista donde se puede pasar de una visión a otra de forma muy rápida y fácil… todo es muy fino, muy fino. No tengo tan claro que puedas ir dejando clientes porque no comulgan con tu visión. No digo que no puedas hacerlo, de hecho, nosotros lo hacemos… pero no podemos aplicarlo como norma. Es un deseo que, a veces, puedes ver cumplido pero otras no.
Siento discrepar sobre las barreras de entrada. No se puede generalizar. Hay negocios donde sí son altas o, cuanto menos, son difíciles de superar. En este caso, son muy bajas. No me quejo, solo expongo una situación real. Y eso no es mejor, lo ideal es tenerlas cuanto más altas, mejor 😉
Y también discrepo de lo del médico (no terminaríamos nunca con los comparaciones). Una agencia de publicidad no tiene porque hacer tele, pero tiene que saber venderse a si misma. No sé, quiero predicar con el ejemplo y me parece que es una buena manera de medir la «profesionalidad».
Y no he probado un vino malo pero una vez me sentó fatal unas copas de cava y nunca más he vuelto a probarlo 😉
Gracias!
Cuanta razón tienes, cualquier empresa de publicidad o de creación de web intenta vender estrategias 2.0 y lo hacen gracias al desconocimiento del cliente, me parecen super correctas las pruebas de algodón que propones y sobretodo el tema del CV de la empresa.